HUMANISMO,LIBERTAD Y TECNOLOGÍA CIBERNÉTICA EN LA ETAPA DE LA CRISIS  CULTURAL DE OCCIDENTE.

II

LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL Y LA MUERTE DEL ARTE.

Arribamos a una etapa que re-lanza a la palestra a los grandes dialécticos.Primera consecuencia del derrumbe cultural.Y entonces vamos a ellos en busca de respuestas.Es obligado.

Recordemos que es justamente Hegel— que continúa vigente— quien reafirmaba la “muerte del arte” concluyendo que renacía en etapas posteriores.Pero esa afirmación Hegeliana se correspondía a cada etapa del desarrollo histórico y podría culminar con el “fin de la historia”.

Los materialistas dialécticos posteriormente sostenían que “el arte sobrevivirá” es decir planteaban que el “arte” sobrevivirá a la historia,que la creación estética “no fenecería”,etc.

Hoy estamos dilucidando este debate.

Pues todo este resumen es en razón de que eso que denominan inteligencia artificial--IA--se afirma en el “parloteo” mediático, que lo que produce es “ARTE” o por el contrario--analizando--si su empleo significa lisa y llanamente  “la muerte del arte”.

“ARTE ES LA EXPRESIÓN MAS PURA Y EXCELSA DE HUMANISMO”

Y justamente en este presente y como muestra de la trascendencia de estos tiempos para la vida,continuidad de la especia y su produccion artística,literaria,poética.etc.irrumpe lo que mal denominan “Inteligencia artificial” pero,herramienta ésta,que carece de  esa substancia vital creadora,innovadora patrimonio exclusivo del “hombre”.Productor de emociones.

LA EMOCION

No hay arte—creación— sin emoción.Sentimientos.Vivencias propias del artista.Ni tampoco IA puede “hacer catarsis”.Cada ser humano es UNICO.Con sus vivencias.De cömo ve—ese ser humano—“el objeto”.Como le impacta “el mundo”.Existe en sustractum una “función social” en el objeto artístico.No puede la I.A.ser jamás “un grande” y ser vehículo de transmisión cumplimentando esa función.Es decir “crear arte” para simplificar.En una palabra:carece de sentimientos.

IA-“Milonguita” es sólo una herramenta.Una simple herramienta.

CONTINUARA EN LA TERCERA PARTE(III)